Después de recolectar la opinión de diferentes personas, de distintas edades y distinto sexo, las opiniones no se diferencian demasiado. En las tareas de la casa generalmente los niños ayudan menos que las niñas donde sus propios padres y familiares les crean esa falsa creencia de que las niñas por serlo deben limpiar, cuidar la casa mientras los niños juegan tranquilamente. Ese caso normalmente se da más en los pueblos que en las ciudades donde ya poco a poco se estabiliza el derecho y el deber de la repartición de dichas tareas.
En el mundo político la figura masculina predomina más que la femenina. Las diferentes opiniones de los encuestados en esta ocasión todas coinciden: Piensan y me incluyo en ella, que el machismo ciega a las personas creyendo así que las mujeres no sirven para gobernar al pueblo y no tienen cualidades habiendo en muchos casos un error grandísimo en esa afirmación, puesto que las mujeres en muchas ocasiones demuestran mayor poder de liderazgo.
Otro punto a objetar son los juguetes. Aunque parezca una tontería es un hecho importante lo que afecta a los niños los roles de este tipo. “Los niños coches teledirigidos y las niñas muñecas”. Siempre se ha creído eso lo correcto, y en mi opinión y la de mis entrevistados, no está bien. Los niños deberían poder jugar con el juguete que prefieran. Los roles les prohíben, por el miedo al rechazo del resto de la sociedad, hacer ese clase de cosas.
En el deporte hay mucha más variedad de opiniones sobre las supuestas razones de porque hay muchos más hombres que mujeres. Unas opiniones indican que es por la capacidad de las mujeres, que al ser distintas a los hombres les impiden jugar a juegos variados y diversos. Otras opiniones afirman que es por el machismo puesto que si entrenan a las mujeres pueden ser igual de buenas o incluso tal vez mejores que algunos jugadores de su deporte.
Las estadísticas indican que las mujeres tienen el nivel académico mucho más alto que los hombres, pero aun así hay muchas más mujeres en paro. Todas las opiniones coinciden en que el causante de esto aparte del desempleo es el machismo que de nuevo excluye a la mujer un poco de la sociedad. Los empresarios prefieren a hombres antes que a mujeres mejor cualificadas, no siempre, solo en distintos casos, pero es la mayoría de las ocasiones dadas. Eso para mí no es una opinión, sino una realidad.
En realidad todas nuestras opiniones coinciden en lo mismo. La sociedad ha cambiado los roles, sí, pero aún queda mucho por hacer y mucho por lo que luchar. La igualdad no es completa y quedan cosas pendientes por igualar. Estos solo son casos de roles, supongo, más conocidos, de tantos como hay. La mujer poco a poco se va involucrando más y más en la sociedad, pero como acabo de decir, poco a poco.
Ana Isabel Gil Sánchez 3º ESO C